Sin emociones no se puede ni vivir ni decidir…
Es nefasto dejarse llevar por las emociones, pero es peor no tenerlas… Vivir sin ellas, es una sentencia de muerte. Experimentamos emociones cuando sentimos que algo importante nos está sucediendo, o nos puede suceder. Gracias a la reacción emocional, nuestro cuerpo y nuestra mente, se ponen en alerta para responder a esta situación, de la mejor manera posible.
Está demostrado, que las emociones afectan nuestra manera de ver y de mostrar el mundo. Afectan en nuestra atención, memoria y en nuestros razonamiento lógico. Las emociones nos apartan de un pensamiento determinado solamente para hacernos prestar atención a otro que emerge como más importante. Las emociones intervienen en la memoria como un criterio excelente para determinar qué datos recordar. Son importantes para la toma de las decisiones. La alegría, nos condiciona a intentar repetir esa sensación; la repugnancia, nos impide comer, por ejemplo, alimentos en putrefacción, por más que estemos famélicos, para evitar una infección.
Necesitamos emociones para tomar decisiones, comunicarnos, comprender a otras personas y asegurar la transmisión de nuestros genes.
Paul Eckman, lleva 30 años investigando la universalidad de las emociones básicas. Es el que más sabe sobre cómo expresar nuestros sentimientos, experto hoy en la detección de las mentiras.
Es el sistema de expresión más extenso. Hay cuatro capacidades. Una de ellas es la capacidad de elegir ser o no ser emotivo. Hay un espacio entre el impulso y la acción. Es posible espaciar el impulso de la acción porque es muy pequeño, pero se puede ir ampliando con entrenamiento. La Segunda capacidad es, cuando se está emotivo pero se puede elegir, cómo es el comportamiento, cuando se está emotivo. El impulso normal es reaccionar ante el enfado, pero sería más útil dirigirlo hacia el enfado, no hacia la persona. Aprender a ser más sensibles hacia las emociones de los otros, es la tercera capacidad. Para ello estaremos pendientes en la microexpresión facial. La cuarta capacidad, disminuir el número de errores y aumentar la exactitud.
Las emociones se aplican en todas partes. Se ha demostrado que una melodía reduce los niveles de estrés y ansiedad. Es el tempo musical lo que influye sobre los niveles de ansiedad. Las piezas más suaves tienen un efecto relajante. Son tan importantes como la vida misma. Los psicópatas no tienen emociones, y todos sabemos las consecuencias nefastas, que tienen sus acciones. Las emociones son universales. Todo ser humano tiene formas de respuestas a las emociones, que vienen dadas genéticamente.
Las emociones son importantísimas. No hay ningún proyecto sin emociones. No se hace correctamente si no es con las emociones. Cada proyecto tiene un componente emocional importante para la toma de decisiones. De hecho, las redes sociales están basadas y construidas sobre las emociones.
Debemos tener en cuenta que muchas emociones se aprenden. Las emociones nos permiten afrontar las experiencias y los desafíos. Debemos aceptarlas no esconderlas, ya que nos aportan beneficios para la comunicación y así podemos compartir lo que nos sucede. A su vez, nos enseña a diferenciar lo que nos desagrada de lo que nos agrada, y esto nos ayuda a decidir lo más adecuado para nosotros, como si fuera una guía a seguir para nuestras decisiones.
Todas las emociones, nos sirven para expresar sentimientos y para sobrevivir, es decir, para de alguna forma, protegernos, como por ejemplo, el miedo, que nos hace huir o combatir). Normalmente, son reflejos instantáneos de lo que nos sucede. La ira, cuando sale desatada, debemos ser conscientes que está mal canalizada.
Podemos hablar de 6 tipos de emociones:
- Miedo: Nos sirve para protegernos.
- Sorpresa: Nos orienta en una situación.
- Alegría: Nos insta a repetir momentos similares.
- Ira: Nos induce a la destrucción.
- Tristeza: Nos motiva a una reestructuración personal.
- Aversión: Nos produce rechazo a lo que tenemos delante.
La mayor parte de estas emociones, son transmitidas a través del lenguaje corporal o comunicación no verbal. Nuestro colaborador, Rafael López, es Experto en este campo, Presidente en Fundación Universitaria Behavior & Law, Director en Club del Lenguaje No Verbal, y nos enseña que transmitimos mucho más, cuando no hablamos, que cuando lo hacemos. Si intentamos ocultar mentiras, se hace muy difícil con este sistema de estudio científico…
Demostrar emociones es positivo, nos da un rendimiento personal al día muy enriquecedor, y nos ayuda a socializarnos.
Os invito a que viváis a través de las emociones…
Un abrazo de colores!