viernes, 27 de febrero de 2015

¿Cuál es la música que acompaña la vida de nuestros niños?; por Aquiles Báez

¿Cuál es la música que acompaña la vida de nuestros niños?; por Aquiles Báez

Por Aquiles Báez | 27 de enero, 2015
Cuál es la música que acompaña la vida de nuestros niños; por Aquiles Báez 640
Fotografía: Talleres infantiles de cultura popular de la Fundación Bigott
La música para los niños es fundamental. Diferentes estudios psicológicos coinciden en que los niños que escuchan música con contenido (como el jazz, la música clásica o la música folclórica) desarrollan habilidades tanto físicas como intelectuales que tienen que ver con la creatividad y la imaginación.
Además, los infantes que estudian algún instrumento musical, desarrollan habilidades matemáticas como la capacidad de abstracción, y al estar utilizando los dos hemisferios del cerebro se estimulan la  parte creativa y la lógica, pero además se desarrolla al niño a nivel de motricidad.
La música que desarrolla los sentidos y la actividad intelectual es muy contundente, más aún en esas edades tempranas. Me parece fabulosa la manera en la que en muchos de nuestros pueblos de Venezuela los niños se vinculan con sus raíces. Los vemos tocando quitiplás, tambores, cuatro, maracas, bandola… y logran dominar géneros musicales bastante sofisticados.
Pero esta realidad está cambiando: es triste ver cómo las tradiciones que forman parte de nuestra esencia están siendo afectadas y nuestros niños están cambiando la música tradicional infantil, las nanas, los cuentos, los cantos folclóricos y esa creativa ingenuidad por “el perreo” y otras formas “extra-ordinarias” que, para más, también son importadas.
Nuestros niños se están viendo afectados por un entorno cargado de sexualidad y vulgaridad. Es probable que quien lea este post, donde estoy utilizando estos términos y calificativos, piense que soy un beato salido del San José de Tarbes o que soy muy puritano. Pero no: lo que pasa es que estoy hablando del futuro que nuestros hijos representan y sobre eso hay que hablar, como decimos en venezolano, claro y raspao. Porque, pensando con el corazón, me preocupa el futuro de la relación entre los niños venezolanos, la música y el contenido que están escuchando. Y las canciones que acompañan muchas de las fiestas infantiles de hoy en día son aberrantes.
Tengo un hijo pequeño, de año y medio. Entre muchas otras cosas quiero que crezca con una mejor educación, que tenga mejores oportunidades que las que yo tuve, que se críe rodeado de valores éticos en el buen sentido de la palabra, pero la música “mainstream” actual nos rodea de vacío, mediocridad, vulgaridad y chabacanería.
Todo lo que escuchamos en edades tempranas quedan en el inconsciente. Los niños son como esponjas capaces de absorberlo todo. Y uno puede tratar de educarlos de la mejor manera posible, pero si en su entorno hay discursos errados y cargados de antivalores, eso también quedará en sus cabecitas.
Vemos a padres que consideran “una gracia” que sus hijos pequeños hagan el famoso perreo. Vemos que hay escuelas primarias y preescolares donde utilizan música de reguetón para presentarlos en sus bailes (con perreo incluido) de los actos culturales, en los recreos y en las actividades especiales.
Hay progenitores que se enorgullecen porque sus niños varones frecuentemente ven “videos” con canciones poco pudorosas que estimulan la sexualidad. Quienes divulgan esta música para los niños no se dan cuenta de la irresponsabilidad tan grande que están cometiendo.
El inconsciente es una construcción colectiva y esta generación que está creciendo es perjudicada por quienes no se dan cuenta de su influencia en quienes hoy son adolescentes. Es obvio que temas como la responsabilidad del embarazo precoz, el sexo en la preadolescencia y la actitud vaga y vacía de muchos de nuestros jóvenes no se le puede adjudicar a la música con exacerbado contenido sexual de estos tiempos, pero es sin duda “una mala influencia”, como diría mi abuela: es una puerta a la sexualidad temprana, al no-pensamiento.
Siempre ha habido música mediocre e inapropiada, pero al menos en tiempos pasados no estábamos tan expuestos como hoy en día y, sin duda alguna, había una mayor conciencia a nivel de contenido. ¡Todo esto es tan loco que hacen que uno extrañe a Popy!
Hay que tomar en cuenta que todo tiene su momento y su espacio. Imaginen lo siguiente: que alguien le diera bebidas alcohólicas a niños de tres años. Es impensable, ¿no? Como les comentaba, por ser padre voy a muchas fiestas infantiles y en casi todas hay un punto en común: música inadecuada para niños.
Hace como un mes fui a un cumpleaños de un amiguito de mi hijo y quedé sorprendido por las letras de las canciones que estaban sonando. Esos “poemas urbanos” decían cosas como “Serrucho, serrucho, esta noche te doy con mi serrucho” para luego  exclamar: “¡Clava! ¡Clava! ¡Clava!” y después escuché otra que decía: “Te voy a dar por el cú…” mientras que la siguiente canción repetía reiteradas veces: “A ti te va a caer el hacha porque eres una sexy muchacha”, continuando con “¡Machete afilao!”
Mi paciencia en un momento colapsó. Fui donde el chico con audífonos que tenia actitud de DJ y se encargaba de la música. Le pregunté quién decidía cuáles eran las canciones que se oían en esa fiesta y el muchacho me respondió de muy de mala gana: “La dueña de la fiesta”, a lo que  le respondí muy en criollo algo que me salió desde muy adentro:
– ¿Tú crees que yo soy pendejo? Eso es lo que tú oyes y no es apropiado para una fiesta de niños.
El chico volteó la mirada: era como si yo no existiera. Y confieso que me sorprendió ver el vacío en sus ojos, la actitud tan apática y desafiante, así como la sorpresa ante mi pregunta. Estas cosas están sucediendo, aunque parezcan salidas de un cuento de Stephen King, con una cantidad de zombis tratando de controlar la mente de las personas. Y quizás aquel chico que hacía de DJ es uno de esos zombis que se ha transformado en autómata y, sencillamente, pone esa música de manera mecánica, sin pensarlo. Quizás nunca alguien le había reclamado por poner ese tipo de música. Y eso me dejó pensando, haciéndome muchas interrogantes que quiero compartir con ustedes: ¿qué hace una canción con una letra como ésa en una fiesta de niños entre uno y siete añitos?. ¿Qué significa esto a nivel de contenido? ¿Cuál es el desarrollo intelectual que pueden dejar letras como ésas? Si la música tiene que tener un espacio formativo”, ¿dónde está lo didáctico? ¿Dónde está la música?
Medité un poco antes de molestarme realmente: creo que ese muchacho es una consecuencia y un ejemplo de cómo esta música puede afectar a algún individuo. ¿Pero cómo cambiarle la mentalidad a alguien que lo que ha escuchado son géneros musicales mediocres y cuyos referentes son música de un solo acorde y el pum-pum en las frecuencias bajas?
Nos hemos habituado a la contaminación visual y auditiva, sin tomar en cuenta que esto también afecta a nuestros niños, sumándole a eso el excesivo volumen que hace que el niño se acostumbre a altos decibeles. Sin querer ser profeta del desastre, es probable que cuando estos niños lleguen a ser “adultos contemporáneos” habrán perdido una buena parte de su audición. Incluso uno sale con su “pitíco” en el oído y ronco de tener que gritar para poder hablar, así que los padres también debemos estar perdiendo la audición y las cuerdas vocales.
Un niño lo que quiere es jugar, no quedarse sordo. Después de una cierta cantidad de decibeles, el ruido se considera contaminación sónica y genera varios tipos de penalidades. En otros países existen regulaciones del volumen cuando puede ser nocivo para la salud, desde conciertos en vivo, shows musicales en Broadway y fiestas.
Pero si ese chico encargado de poner la música no tiene otras referencias, ¿cómo va a entender que esa música es inapropiada para una celebración llena de niños? Un autómata aturdido por la mediocridad sónica no puede hacerlo. Y lamentablemente he visto a muchos de estos muchachos que andan en automático.
Señores, esto es grave.
Salimos a la calle y en cualquier restaurante exponen en pantallas enormes videos con música a elevados decibeles y un alto contenido sexual, tanto en lo visual como en lo auditivo. Lo más irónico es que estos restaurantes se autodenominan como “Ambiente Familiar”.
Si alguien en sus plenas condiciones y de manera adulta decide ver pornografía, ésa es una responsabilidad personal. Pero ir a un restaurante y que lo que se vea en los televisores sean videos que podrían ser considerados “soft-porn” es algo terrible para nuestros niños, que empiezan a ver la sexualidad enmarcada en una realidad deformada y llena de antivalores, en lugar del hermoso encuentro entre dos personas.
Además, el contenido que relatan las historias detrás de estos videos son fórmulas patéticas donde esas “mamitas” aparecen como amantes de unos mafiosos o narcotraficantes, pero ellas están enamoradas de los cantantes y sus típicos “chocolaticos” con quienes le “montan cacho” a sus maridos. Impresionante el mensaje, ¿no les parece? Es lo más parecido a una cátedra dictada por Calígula o Nerón. Nos vemos sumergidos en una dictadura visual y auditiva que genera efectos negativos y no nos damos cuenta de eso. Y acá también hay una gran responsabilidad de las autoridades locales, porque este tipo de videos definitivamente no son aptos para todo público.
Vivimos en una realidad compleja. Ser padres implica muchas cosas y no es fácil: hay que tener tenacidad, astucia, sacrificio, pero sobre todo es una gran responsabilidad. Hablando como padre, tengo una gran frustración porque veo un entorno lleno de “malas influencias”. Y es nuestra obligación como padres, tíos, abuelos y seres pensantes hacer algo al respecto. Tenemos un argumento que moralmente es muy contundente: pensar en nuestros hijos, que son el mayor patrimonio que tenemos. Por supuesto que sé muy bien que esto sería luchar contra una gran industria que posee muchos tentáculos, pero cada uno de nosotros puede ayudar a buscar soluciones.
En Venezuela, acá mismo, tenemos música infantil de muchísima calidad. Apenas por nombrar a algunos de los muchos artistas y creadores, piensen y busquen la música de Rosario Anzola, Henry Martínez, Conny Méndez, Edgar Ojeda, Fabby Olano, entre tantos otros que han dejado un repertorio fabuloso que para muchos es prácticamente desconocido.
Discos de música infantil como los de Ilan Chester, María Teresa Chacín, Serenata Guayanesa, Las Ninas, o El Chamario, con poemas de Eugenio Montejo interpretados por con Bartolomé Díaz y Andrés Barrios, tienen que ver con nuestra identidad y son referentes de la música infantil hecha en Venezuela.
Hay quienes  ponen en sus fiestas infantiles discos como estos (o al menos con contenido infantil), pero lamentablemente no son la mayoría. Les pido por sus hijos a quienes son padres. Y a quienes no lo son por sus sobrinos, primos, ahijados o simplemente por la esperanza de tener un mejor futuro, que seamos conscientes y entendamos que hay música que pueda afectar a nuestros niños.
Los niños son la esperanza: no podemos sino darles amor y educación. Debe ser una prioridad, una necesidad. Cada vez que estén en un lugar con niños donde haya música que tenga contenido inapropiado para ellos, ejerzan su derecho a reclamar a la persona responsable. Es nuestro deber y es nuestro compromiso con ellos y con su formación.
Ése puede ser nuestro granito de arena. Tenemos que cuidar el mañana.
ROSARIO ANZOLA |  EL UNIVERSAL
jueves 26 de febrero de 2015  12:00 AM
Como maestra, como profesora, como mamá, como escritora, desde siempre me he planteado cuál es la mejor manera de acercar al niño a la literatura. Y con el paso de los años mi conclusión es: leer, leerles, enseñarles a leer para que lean... desde el corazón. Ésta ha sido, y es, mi prédica por muchos años, por eso quiero compartir con los lectores algunos hallazgos del espíritu de la letra.

En los cursos que he dictado, para padres y maestros, encuentro barreras culturales que desvirtúan la esencia de la literatura como experiencia vital, gozosa y gratificante, contraria a la penitencia y la obligación en que, muy a menudo, la convierten los adultos modeladores. Y no es ni "culpa" ni responsabilidad de estos adultos que, simplemente, se conducen de acuerdo a su experiencia lectora, a la formación (o deformación) que tuvieron en la escuela o en el hogar. Por eso quiero presentar a los lectores una reflexión que contribuya a reubicar el abordaje de la lectura.

Con el paso del tiempo perdemos las conexiones que nos permiten, como cuando éramos niños, apreciar, interpretar y expresar lo que sentimos. Vista, tacto, gusto, olfato y oído se van esclerosando y encasillándose en los convencionalismos. Sin la sensorialidad ejercida y vivida no es posible conectar con los sentimientos.

"Stress"

La evolución de las sociedades ha ido dejando a un lado la admisión y la expresión de palabras como temor, alegría, tristeza, angustia, gozo, sustituyéndolas por una especie de sordomudez emocional reducida a la palabra "stress". Hubo épocas en donde el niño se formaba por transmisión dinámica de vivencias y valo-res; de esta forma crecía en un aprendizaje asimilado al hogar, al medio, a los otros seres vivos. Aprendía a reconocer, ordenar y manejar sus emociones y comprender las de los demás. La empatía era obligante para convivir y sobrevivir. No obstante, poco a poco, la modernidad abandonó los repertorios emocionales para entronizar académicamente la supremacía de la racionalidad. Mientras más atrás buscamos en el tiempo, encontramos la paradoja de que el ser humano era capaz de vivir en concordancia con la naturaleza y el cosmos, habilidades extraviadas en la medida del avance de "la civilización".

¿Y qué es lo primero a explorar para salir de este extravío? La respuesta se encuentra en el germen del pensamiento y la palabra: los sentimientos y las emociones. Debemos darnos tiempo y permiso para revisar, analizar y ubicar nuestros sentimientos y emociones, solo así podremos apreciar los matices y la intensidad de la existencia y solo así podremos comprender los sentimientos de los demás.

Los poetas, los artistas y los niños son capaces de mantener esta concordancia y deambular a plenitud por el universo de las emociones y la sensibilidad. La literatura asumida sensitiva y sensorialmente, nos conduce a estas conexiones que potencian la experiencia lectora... desde el corazón. Esa es la vía para transmitir a hijos o alumnos las claves, los secretos, los pasadizos y las infinitas dimensiones que la palabra encierra.

Vía primordial

Los sentimientos son una vía primordial de conocimiento y son complementarios a la racionalidad. Este postulado es el eje de recientes movimientos pedagógicos basados en la existencia de la inteligencia múltiple, en la que destaca la inteligencia emocional. En ella se establecen conexiones entre los sentimientos, el carácter y los instintos morales, de los cuales depende la aptitud y el talento para vivir. Las escuelas más vanguardistas han incorporado a sus currícula el entrenamiento de las habilidades emocionales y sociales que se enseñan, se modelan y se aprenden... para bien o para mal.

Traigo a colación lo que nos apunta Daniel Goleman en su libro "La inteligencia emocional":

La lógica de la mente emocional es asociativa; toma elementos que simbolizan una realidad, o dispara un recuerdo de la misma, para ser igual a esa realidad. Es por eso que los símiles, las metáforas y las imágenes hablan directamente a la mente emocional, lo mismo que el arte: novelas, películas, poesía, canciones, teatro, ópera. Los grandes maestros espirituales, como Buda y Jesús, llegaron al corazón de sus discípulos hablando el lenguaje de las emociones, enseñando con parábolas, fábulas y relatos. De hecho, el símbolo y el ritual religioso tienen poco sentido desde el punto de vista racional; se expresan en la lengua vernácula del corazón. Esta lógica del corazón -de la mente emocional- está bien descrita por Freud en su concepto de 'proceso primario' de pensamiento; es la lógica de la religión y la poesía, la psicosis y los niños, el sueño y el mito".

Los invito a leer desde el corazón, es una experiencia que se transfiere a todas las manifestaciones del arte. Es un aprendizaje a plenitud.

Caetano Veloso Cucurrucucu Paloma Hable Con Ella

Campaña de destrucción cultural TERRORISMO


TERRORISMO

Campaña de destrucción cultural

El IS destruye las estatuas asirias de Mosul y quema miles de libros

  • El patrimonio destruido pertenece a la civilización asiria, que ocupó el norte de la antigua Mesopotamia entre el 1813 a.C. y el 609 a.C.

IRAK/IS Destrucción del museo y la biblioteca de Mosul
  • Ver más
Mosul, la segunda ciudad de Irak, ha sido testigo de este jueves del último y brutal atentado del autodenominado Estado Islámico contra su milenario patrimonio. En un vídeo difundido en las últimas horas, varios hombres derriban; golpean con mazas, trituran y taladran esculturas de la civilización asiria que hasta ahora permanecían expuestas en el museo de la ciudad o habían sobrevivido en las ruinas de la ciudad de Nínive.
"Musulmanes, los objetos que están detrás de mi son ídolos de pueblos anteriores al nuestro. Los asirios tenían dioses para la guerra, la lluvia y se aproximaban a ellos a través de ofrendas. (...) El profeta nos ordenó deshacernos de las estatuas y las reliquias", explica un combatiente de la organización yihadista al inicio del vídeo, de 5 minutos de duración y al que ha tenido acceso íntegramente EL MUNDO. El patrimonio destruido pertenece a la civilización asiria, que ocupó el norte de la antigua Mesopotamia entre el 1813 a.C. y el 609 a.C.
La campaña contra las antigüedades asirias también ha afectado a las ruinas de la ciudad de Nínive, en las afueras de Mosul, tomada por los yihadistas el pasado junio e incluida en un califato que ocupa amplias zonas de Siria e Irak. El vídeo muestra a varios miembros del IS (Estado Islámico, por sus siglas en inglés) trepando por los colosos de Nínive para golpearlos y trocearlos y la quema de cientos de libros de la biblioteca de Mosul, un centro fundado a principios del siglo XIX cuyo saqueo ha sido denunciado en los últimos días por activistas de la ciudad.
"El IS ha difundido esta mañana la destrucción de las estatuas a través de las pantallas que tiene colocadas por la ciudad. Es el segundo mayor museo de Irak tras el de Bagdad y cada pieza asiria guarda un pedazo de la historia de esta ciudad", ha lamentado en declaraciones a EL MUNDO el activista Rayan al Hadidi, oriundo de la hoy sojuzgada Mosul.
La "destrucción de los falsos ídolos" es uno de los puntos incluidos en el panfleto que los yihadistas -defensores de la interpretación más fundamentalista del islam- repartieron en junio prohibiendo el consumo de tabaco o alcohol o aconsejando que las mujeres permanecieran en casa. Sus tropelías han disparado las alarmas de organismos como la Unesco, que ha celebrado desde entonces reuniones para trazar un plan de emergencia. "Las preocupaciones humanitarias y de seguridad son inseparables a las culturales. Proteger vidas humanas, su patrimonio cultural e identidad van de la mano", advirtió la directora general de la Unesco, Irina Bokova.
En el vídeo difundido este jueves, el IS se regodea en la destrucción. "Cuando dios nos ordena retirarlas y destruirlas es muy fácil. Ni siquiera nos importaría si costara millones de dólares hacerlo", señala a la cámara el combatiente que detalla el ataque. En las últimas semanas, los yihadistas han retirado y prendido fuego a miles de libros procedentes de las biblioteca municipal -con un notable fondo de manuscritos antiguos- y de la Universidad de Mosul. Se han cebado con los ejemplares de ciencias y filosofía y solo han salvado de la quema los textos islámicos respetados por su ideario fundamentalista.
Hasta la fecha los yihadistas habían derribado santuarios suníes y mezquitas chiíes en la provincia de Nínive, cuya capital es Mosul. Las víctimas fueron los monolitos de Abu Tamam, un poeta árabe de época abasí -nacido en 788 d.C.- y Ozman al Musuli, un músico iraquí del siglo XIX y el mausoleo de Ibn al Azir, filósofo árabe de la corte del sultán Saladino en el siglo XII d.C. que la población local conoce como 'La tumba de la chica'.
El legado cristiano de la urbe también ha sido blanco de la insurgencia suní. Los guerrilleros han asaltado dos símbolos de la herencia cristiana asiria: las catedrales caldea y ortodoxa siria de Mosul. Como ha sucedido en los templos capturados en Siria, el IS reemplazó inmediatamente las cruces del exterior por las banderas de la organización.
Los lugares más sensibles han sido las ruinas de la antigua ciudad asiria de Nínive y de Hatra, capital del reino de los partos entre el 247y el 226 a.C declarada Patrimonio de la Humanidad e incluida desde 2010 en el listado de sitios culturales en peligro de extinción por el Fondo de Patrimonio Mundial debido a los saqueos y la falta de protección gubernamental. Ambos enclaves se encuentran en los alrededores de Mosul, en zonas de las que el ejército iraquí huyó sin librar batalla con los escuadrones del IS.
El país árabe, rico en petróleo y acostumbrado a las turbulencias, parece abocado a una nueva tragedia cultural. "Tras la caída de Sadam Husein en 2003 Irak sufrió a saqueadores que se llevaron miles de tabillas cuneiformes de incalculable valor, esculturas, placas de bronces, libros y otros artículos tanto del Museo Nacional de Bagdad como del Museo Arqueológico de Mosul", detalla Ayman Jawad, director de la organización 'Iraq Heritage'. Precisamente los trabajos de renovación del ahora atacado museo de Mosul concluyeron unos días antes de la llegada a la ciudad de los yihadistas.

TERRORISMO

Campaña de destrucción cultural

El IS destruye las estatuas asirias de Mosul y quema miles de libros

TERRORISMO

Campaña de destrucción cultural

El IS destruye las estatuas asirias de Mosul y quema miles de libros

Ella es.

Marga Canalejo     Ella es, ante todo y sobre todo una profesional, y sabe....que los globos son, sólo eso, Globos. Blufh$$$$ que, o bien ...

Translate